Hay que admitirlo, Aileen es seguramente el personaje más horroroso que la bella sudafricana ha tenido que interpretar en su vida. Pero, afortunadamente, pudo desquitarse un año después con su arrebatador aspecto en Head in the clouds (Juegos de mujer), donde, por cierto, aparecía también Penélope Cruz.
2. JAVIER BARDEM en Mar adentro (2004)
Alejandro Amenábar consiguió lo que parecía imposible: Dejar feo a uno de nuestros actores más interesantes. No es que Javier Bardem sea precisamente guapo, pero su virilidad exuberante ha roto esquemas más allá de nuestras fronteras. Hollywood se rindió a sus encantos con esta película, otorgándole el Oscar a la Mejor película de habla no inglesa.
3. CRISTIAN BALE en El Maquinista (2004)
El británico se sometió para este filme a la transformación más radical que hayamos visto. El maquillaje ayudaba, pero como puede verse en la foto, él tuvo que adelgazar hasta el extremo de lo saludable.
4. ANGELINA JOLIE en Inocencia Interrumpida (1999)
Es sin duda la actriz más sexy y deseada en todo el mundo, pero no dudó en aparecer como una pequeña traumatizada y desquiciada adolescente en su papel en Inocencia Interrumpida, coprotagonizada por otra belleza, Winona Ryder.
5. JOHNNY DEPP en El libertino (2005)
Es sin duda el actor más carismático del panorama cinematográfico. No tiene problema alguno en disfrazarse, cambiar su imagen y aparecer sucio y feo en sus películas. ¡Por eso, por su descaro, su creatividad y su talento, nos gusta tanto!
6. HILARY SWANK en Los muchachos no lloran (1999)
Se está convirtiendo en una actriz muy peculiar por su valentía a la hora de escoger papeles contovertidos. En Boys don't cry se puso en la piel de una transexual que trataba de esconder su verdadero género para vivir como un hombre y seducir a una chica que acaba enamorándose de su verdadera y compleja identidad.
7. PATRICIA ARQUETTE en Estigma (1999)
Muchos la han conocido gracias a su papel en la serie televisiva Medium, pero es justo decir que Patricia Arquette es un actriz con una larga trayectoria a sus espaldas. En su pasado figuran títulos como este apasionante (y desagradable) Stigmata, Human nature, Hi-Lo Country, Lost Highway o Ed Wood.
8. TOM HANKS en Philadelphia (1993)
Estaba en la cresta de la ola, era el actor favorito de Hollywood y sin embargo no se acobardó a la hora de interpretar a un homosexual enfermo de sida. Antonio Banderas hacía de pareja de este hombre que, a medida que abanzaba la película, ofrecía un aspecto más deteriorado. El actor norteamericano comentó posteriormente la dureza del papel.
9. MEL GIBSON en El hombre sin rostro (1993)
También era un guapo oficial cuando aceptó este papel, donde daba vida a un hombre que decidía alejarse de la sociedad tras sufrir una aparatoso accidente que desfigura su rostro para siempre.
10. GARY OLDMAN en Drácula (1992)
La verdad es que este inglés de Londres no es precisamente conocido por su belleza, pero podemos aseguraros que para hacer de Drácula hubo que maquillarle... ¡y mucho!